En tiempos de crisis hay que aprovechar lo que tenemos al máximo y las compras que hagamos las tenemos que rentabilizar al 200%. Por eso, os propongo dos looks con un mismo vestido: uno más elegante y otro de diario.
Para conseguir que el vestido tuviera un aire de gala, le he añadido un collar que actúa de cuello, pareciendo parte del vestido. Además, me he recogido el pelo en un moño. Para completar el conjunto, un bolso y unas sandalias.
Para el look diario, todo lo contrario. Una cazadora vaquera, un bolso con asa y unos botines de tacón quitan cualquier aire festivo al vestido y consiguen un look casual que bien podría servir para ir de compras, a comer con unos amigos o incluso de fiesta.